Melbourne se mueve en trams.
Aunque éste que está pasando por frente a Flinders Station, que justamente es el que conecta mi barrio con la Universidad pasando por el centro, es sumamente lento.
Chapel street y otras calles mantienen los antiguos trams, que aún funcionan impecable. Para subir hay que pegarse un salto, el cual con el coche de Clara se hace un poco complejo.
Conocer la ciudad en tram es un gran panorama.
Hay de diferentes colores, este diseño no deja de recordarme las máquinas del imperio que atacaban a los Ewoks en el "Regreso del Jedy".
Los trams más modernos son un agrado, espaciosos y tan sólo un leve escalón los separa del suelo.
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| De Melbourne |
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