lunes, 18 de enero de 2010

Australian Open


Melbourne es una gran ciudad.
Además de los jardines, el río, las ciclovías, la gente y su diversidad, la ciudad vive en torno a eventos que la reunen en torno al deporte, al arte o la familia.
El Australian Open es probablemente el mayor evento del año, seguido de cerca por la F1, la exposición artística del invierno y la Melbourne Cup.
Este año el Grand Slam tiene a la ciudad efervecente. Nadal y Federer vuelven a medir sus fuerzas y Fernando Gonzalez todo Chile espera que consiga el triunfo. El 2007 el talentoso jugador Chileno llegó a la final y ha declarado que se siente bien en este tipo de superficie dura.
Tuve la suerte de ver el primer partido de Gonzalez (ATP 11), contra el Belga Ruddic (ATP 67), en una cancha relativamente pequeña. El día estaba variable, con viento, nubes, sol y lluvía, típico clima local.
El abierto es un ejempo de organización y coordinación. En más de 18 canchas, los juegos se ván ejecutando al mismo tiempo con personas trabajando para asegurar que el público no entre durante los juegos, 6 peloteros, 8 guarda líneas, 1 árbitro más personal que pasa desapercibido en la cancha. Innumerables restaurantes y puestos de auspiciadores llenan los rincones y la gente concurre ordenadamente a ver los juegos.
Gonzalez destrozó al belga, su derecha fue decisiva en los break points y su saque más rápido fue de 205km/hr. El miercoles derrotó a otro jugador y la barra chilena tuvo que ser intervenida por escándalos tildados de "étnicos" por la prensa local. El viernes jugó con Korolev, a quién destruyó en 4 sets.

Lamentablemente Roddick (7) en un partido de 5 sets, derrotó al cañonero de la Reina.
El Feña estuvo a punto de derrotarlo en el tie break del cuarto set, pero después de esa derrota Roddick retomo brio y se mantuvo firme el último set que ganó 6-2.
Será para la próxima.

Las hermanas Williams, unas máquinas.

No hay comentarios.: